martes, 14 de diciembre de 2010

La noche me confunde

Después de más de 3 meses aquí y unas cuantas salidas, creo que estoy ya suficientemente documentado como para empezar a describir que tal es la vida nocturna aquí en China, concretamente en Shaoxing. Comentaré a grandes rasgos como es una noche de marcha cualquiera un fin de semana en mi ciudad, la cual no ofrece mucha variedad en garitos, si la comparamos con la vecina Hangzhou, por ejemplo, u otras grandes ciudades. Los rituales y costumbres de la gente que sale a divertirse no se diferencian mucho de los que tenemos en los países occidentales, es decir, la peña se toma sus copichuelas, echa unas risas, se marca unos bailes, más copas, y luego a casa. Pero hay ciertos elementos en el ambiente que enseguida nos hacen darnos cuenta de que esto es, como se suele decir, otro rollo.



Nada más entrar a la discoteca o pub de turno, uno se encuentra con una decoración super barroca y churrigueresca, bastante hortera, con camareros trajeados que parecen salidos de Kill Bill (aquella mítica escena de los 88 maníacos ) . En cuanto ven que eres extranjero, se acerca presto y veloz el relaciones públicas de turno y comienza a presentarte los servicios que ofrece el local, al tiempo que te acomoda en una mesa bien situada, cercana a una minúscula pista de baile. Normalmente suelen tener ofertas buenas si venimos en grupos numerosos, así que casi siempre ponemos un bote de 100 yuanes y nos endiñan una caja llena de cervezas (a temperatura ambiente) y una botella de whisky o vodka. Todavía no has terminado de sentarte, cuando llega un camarero con una bandeja repleta de frutas. Nos sentamos, bebemos, charlamos, reímos y nos disponemos a disfrutar del “espectáculo”.





¿Y qué hacen los chinos en la discoteca? Pues bailar, lo que se dice bailar, lo hacen más bien poco. A la gente lo que le gusta es jugar, especialmente a los dados, comer hasta hincharse y beber hasta caerse en redondo. Aparte de los dados, también se ven chicas merodeando por las mesas y jugando con la muchachada a algo así como el “piedra, papel, tijeras”, en el que el perdedor tiene que beberse un chupito de alcohol. Estas chicas son trabajadoras del local y su función es hacer compañía, beber y jugar con los clientes que así lo solicitan, a cambio, claro esta, de previo pago.


¿Un payaso con globos? Todo es posible en China

Pero aparte de estas “chicas de compañía”, y las clásicas go-gos, hay también una gran cantidad de prostitutas, algunas bastante explícitas y otras muchas que bien podrían pasar por chicas normales y corrientes que han salido a tomarse algo con sus amigas. Es algo realmente desolador el descubrir que un 90% de las chavalas que uno se encuentra en este tipo de locales, están currando en diversos menesteres, y que el otro 10% han venido con el novio o marido. Como podéis imaginar, corta bastante el rollo.

Por si no fuera poco, la música es bastante nefasta y está a todo volumen (bueno, esto pasa en todas partes, no es nada nuevo), con lo que tampoco puedes hablar con nadie, y aunque estuviera sonando el murmullo de las olas del mar Amarillo, también es difícil encontrar a alguien que no esté totalmente ebrio (creo que los asiáticos toleran menos el alcohol por la ausencia de cierta enzima).


Menos mal que yo me junto con gente sana que solo bebe gaseosa

Después de relatar semejante panorama, podréis imaginar que no estoy muy satisfecho que digamos con el ocio nocturno aquí, al menos no en Shaoxing. La vez que estuve en Hangzhou me pareció otra cosa, algo más variado y con menos busconas alrededor, al igual que la noche que pasé en Qingdao, en aquel viaje de octubre, o en Nanjing. Me consta pues que la marcha en China, salvando diferencias y choques culturales, es bastante animada y uno se lo puede pasar pipa, pero en lo que se refiere a Shaoxing, cada fin de semana que pasa tengo menos ganas de salir. Si lo hago es, más que nada, para desconectar de la vida en el campus y encontrarme con la gente que no puedo ver durante la semana. Aunque ahora con la llegada de las primeras rachas de frío, mucho me temo que me quedaré hibernando la mayoría de fines de semana.

"La primera vez es una gracia, la segunda vez es una regla."


(Agradecimientos especiales a Carlos por sus fotos, te debo una "mirinda")

1 comentario:

  1. Gracias Paco!! Este era el que esperaba que publicaras ...complacida!!!
    Saludos!!!

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